1. Descripción de los servicios

Esta cláusula debe establecer claramente los servicios que el planificador de eventos proporcionará, incluyendo la gestión, organización y coordinación del evento.

2. Fechas y plazos

Esta cláusula debe especificar las fechas exactas del evento, así como los plazos para la entrega de los servicios por parte del planificador. También es importante incluir cualquier fecha límite para la presentación de documentos o pagos.

3. Honorarios y pagos

En esta cláusula se deben establecer los honorarios acordados por los servicios del planificador de eventos, así como los términos de pago, incluyendo la cantidad y los plazos de pago.

4. Cancelación y reembolso

Es esencial incluir una cláusula que explique los términos y condiciones de cancelación, tanto para el cliente como para el planificador de eventos. Esto incluye cualquier política de reembolso en caso de cancelación por parte del cliente o fuerza mayor.

5. Responsabilidades y obligaciones

Esta cláusula debe detallar las responsabilidades y obligaciones tanto del planificador de eventos como del cliente. Esto incluye las tareas específicas que cada parte debe llevar a cabo para garantizar el éxito del evento.

6. Modificaciones y cambios

En esta cláusula se deben establecer los términos para cualquier modificación o cambio en el contrato de planificación de eventos. Esto incluye cualquier cambio en las fechas, ubicación, servicios o presupuesto acordado.

7. Confidencialidad

Es importante incluir una cláusula de confidencialidad para proteger la privacidad y la información confidencial tanto del cliente como del planificador de eventos. Esto garantiza que ninguna de las partes divulgue información sensible sin consentimiento previo.

8. Ley aplicable y resolución de conflictos

Esta cláusula debe indicar la ley aplicable al contrato y establecer el método para resolver cualquier disputa o conflicto que pueda surgir entre el cliente y el planificador de eventos. Puede especificar si se necesitará la mediación o arbitraje antes de acudir a los tribunales.

Estas cláusulas son fundamentales para garantizar una relación contractual clara y proteger los derechos e intereses tanto del cliente como del planificador de eventos. Es recomendable que un abogado revise y asesore en la redacción de estas cláusulas para asegurar su validez y cumplimiento legal.

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